(Deja unos segundos el cursor sobre los textos con
subrayados de enlaces y podrás leer notas emergentes)
Hace algunas semana extracté un artículo de Alfredo Marcos (“Investigación y Ciencia”, Enero/2011).
Me pareció muy clarificadora su exposición sobre la realidad ineludible de que la filosofía de la ciencia es fundamento previo e irremediable de cualquier acercamiento a la ciencia. Dado que esa realidad suele ser ignorada, cuando no ocultada, consideré oportuno extractar los párrafos que más incidían en la provisionalidad de las afirmaciones científicas y en el condicionamiento sociocultural al que la ciencia también está sometida.
En Marzo, “Investigación y Ciencia” incluía otro interesante artículo que también incidía en las críticas a la supuesta neutralidad y objetividad de la ciencia. Es otra muestra más de la fase menguante en la que ya ha entrado ese mito tan extendido hasta hace pocas décadas.
En esta ocasión el artículo es de Eulalia Pérez Sedeño. Eulalia enfoca la temática desde una inquietud feminista, pero, claro está, sus conclusiones desbordan la polarización de género haciéndose extensivas a otras ámbitos: el racial, el político, el religioso y cualquier otro en el que se manifiesten diferencias sociales o ideológicas.
Dado que el artículo leido en texto "plano" resulta algo difícil de asimilar, me ha parecido oportuno enfatizar las frases más significativas con negritas y subrayados. Y a modo de resumen, podrán encontrar dos concisos párrafos tras el extracto que incluyo a continuación:
Los enfoques feministas arrojan luz sobre la importancia del contexto en la construcción del conocimiento científico.
El feminismo ha contribuido de manera fundamental a cambiar el modo de entender la ciencia y la tecnología. ... Como teoría, el feminismo ha protagonizado la crítica más completa, aunque no la única, a la concepción clásica de la ciencia y la tecnología.
Aunque las aproximaciones feministas a la ciencia son múltiples y variadas, todas coinciden en su crítica a la supuesta neutralidad y objetividad de la ciencia, nociones ambas sustentadas en ciertos principios de la filosofía tradicional de la ciencia, que servían para delimitar las tareas de la filosofía de la ciencia frente a otras disciplinas.
[Hechos frente a valores]
Uno de esos principios tradicionales era la distinción entre «hechos» y «valores». Se trata de una distinción dicotómica, excluyente y jerárquica, pues consideraba que los hechos pertenecían a una categoría superior a la de los valores. Así, la filosofía de la ciencia debía ocuparse solo de los enunciados acerca de «lo que es», mientras que los juicios de valor, sobre «lo que debe ser», quedaban relegados a otro dominio.
[Juicios previos de selección frente a análisis de confirmación]
Otro principio tradicional corresponde a la distinción entre «contexto de descubrimiento» y «contexto de justificación». En el primero intervienen aquellos factores que influyen en los investigadores cuando estos establecen las hipótesis o prácticas científicas; al segundo sólo le importa o le interesa la confirmación o refutación de las hipótesis científicas (a partir de las pruebas y el razonamiento). La filosofía de la ciencia dominante durante gran parte del siglo XX se centró sólo en el contexto de justificación. Consideraba que ese proceso distinguía a la ciencia de cualquier otra actividad y generaba la objetividad característica del conocimiento científico, basada en la neutralidad, la autonomía y la imparcialidad.
[Las antiguas quimeras: neutralidad, autonomía e imparcialidad]
Que la ciencia sea neutral significa que las teorías no implican ni presuponen juicios sobre valores no cognitivos, es decir, que la ciencia no sirve a unos valores más que a otros. Que sea autónoma quiere decir que ni está influida por valores o movimientos socioculturales o políticos. Y que sea imparcial implica que el único criterio para aceptar o refutar una teoría científica son las pruebas objetivas, no los valores. Así, se distingue entre valores cognitivos (o epistémicos) y valores no cognitivos (o contextuales). Los primeros se hallarían en la base de las reglas metodológicas que determinan lo que constituye una práctica científica aceptable (contexto de justificación). Los segundos pertenecería al ámbito cultural y social en el que se desarrolla la actividad científica (contexto de descubrimiento).
La reflexión feminista sobre la ciencia pone en cuestión esas dicotomías clásicas....
...
[La cruda realidad: "Según piensas, así actúas, eliges e interpretas"]
Estudios realizados desde el feminismo han mostrado que los valores contextuales interactúan con la práctica de la ciencia y la tecnología de diversas maneras. En primer lugar, tienen un efecto canalizador o rector sobre la investigación y sobre las decisiones políticas acerca de las aplicaciones técnicas del conocimiento científico. ... Pensemos en el uso de la energía nuclear: algunas científicos están a favor: otros, en contra. Los «mismos hechos» se interpretan de manera distinta en función de los valores y las prioridades.
Asimismo, los conflictos entre los valores éticos y los métodos de investigación pueden hacer variar los protocolos metodológicos, como sucede en el campo de la investigación con animales —sean humanos o no—. Los valores contextuales pueden incluso determinar lo que hay que preguntar y lo que es mejor ignorar respecto de un fenómeno dado. Y pueden afectar también a la descripción de las observaciones y los experimentos, así como a la selección de los datos y el tipo de fenómenos que se quiere investigar.
[Los científicos, tan humanos como los demás humanos]
... La teoría del conocimiento tradicionalmente ha partido de la base de que quien produce conocimiento es un sujeto individual, genérico y autosuficiente, es decir, «aislado» de condicionamientos externos, pura conciencia abstracta e ideal. ...
Amén de inexistente, ese sujeto incondicionado resulta engañoso y peligroso en lo que a sus consecuencias prácticas se refiere. ... La pretendida imparcialidad esconde una parcialidad que ha dado primacía a los intereses, objetivos y valores de cierto grupo, o grupos, sobre los de otros (no solo mujeres, sino también negros, indios, etcétera).
...
No existe, pues, un conocimiento objetivo proveniente «de ninguna parte». ...
... Si en la epistemología tradicional la neutralidad de la ciencia derivaba del carácter objetivo del conocimiento, ahora la afirmación del carácter situado del conocimiento implica la imposibilidad de desligar el conocimiento de «los hechos» de los valores de los sujetos, es decir, la imposibilidad de separar los valores epistemológicos de los no epistémicos. Con ello se reconoce la introducción inevitable de lo político en el conocimiento.
...
Lectura completa en "Investigación y ciencia", edición papel de Marzo 2011, página 36.
La neutralidad y objetividad de la ciencia no es más que un supuesto de trabajo mantenido bajo la quimérica pretensión de ignorar los valores de los que trabajan en la actividad científica.
Los estudios realizados desde el feminismo han mostrado que los valores culturales y sociales influyen:
• en la elección de los objetos de estudio,
• en la interpretación de los resultados y
• en la elección de lo que "es mejor ignorar" .
Cuando hablamos de valores, entramos en el ámbito de las creencias.
Y en este sentido, el colectivo ateo es tan humano como el resto de los mortales.
Y sus creencias en relación al origen y fundamento de la realidad son condicionantes fundamentales a la hora de elegir, dirigir e interpretar los resultados de sus investigaciones.
Así, pues, bajemos a la ciencia de su "divinizado" pedestal, y depositémosla en el taller de la utilidad práctica y benéficiosa para el progreso de la sociedad.
Relacionado:
BíblicaMente.org
Etiquetas FAVORITAS |
Si deseas comentar alguna página, pincha aquí e indícamelo en el mensaje. |
ESTADÍSTICAS WEBNODE
(Desde Nov/08)
8.344.204 | Páginas visitadas |
2.339.207 | Total visitas |
≈701.762 | Visitantes únicos |
Puede consultar los criterios de selección que utiliza Gitnux para realizar la calificación en el siguiente enlace:
Un versículo para hoy
biblicamente.org by biblicamente.org is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 3.0 Unported License.